El concepto de movilidad pone sobre la mesa cuatro pilares y retos fundamentales de las políticas públicas urbanas: la relación con la ciudad, las necesidades y preferencias sociales, la configuración de un sistema de movilidad y la capacidad de gestión gubernamental. Por lo tanto, debe de existir un marco normativo que contemple estos cuatro elementos e incorpore disposiciones y atribuciones para establecer un sistema de movilidad urbana que garantice el acceso equitativo, seguro, eficiente y sustentable a la ciudad a través de los diversos modos y servicios de transporte y movilidad.
 
En WRI México acompañamos el desarrollo de la Ley de Movilidad del Ciudad de México desde la conceptualización de la iniciativa en la Asamblea Legislativa hasta sus últimas versiones en la Secretaria de Movilidad. Incorporamos en esa ley dos elementos fundamentales el sistema integrado de transporte y en conjunto con otras organizaciones, el derecho a la movilidad. A partir de este ejercicio hemos asesorado a los estados en la modificación de sus normativas para que efectúen cambios acordes con sus contextos y detonen avances de fortalecimiento institucional. Impulsamos así mayor coordinación entre los diferentes organismos involucrados, la incorporación de criterios de equidad y prioridad en la movilidad, la formulación de instrumentos de planeación, la articulación con políticas de desarrollo urbano y medio ambiente, y la inclusión de los sistemas integrados de transporte.